Según los datos presentados hoy por Afrucat, Asociación Empresarial de Fruta de Cataluña, y por el DACC, Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, el potencial productivo catalán de melocotones y nectarinas disminuiría un 4% respecto a la pasada campaña, con una previsión de 384.840 toneladas.
Por demarcaciones, Lleida recogería un 4% menos de melocotones y nectarinas (362.360 toneladas), Tarragona un 3% menos (20.080 toneladas), Barcelona un 13% menos (1.480 toneladas) y Girona un 9% menos (920 toneladas). Destacan las caídas de las previsiones de producción de Barcelona y Girona con un 13% y un 9% respectivamente, con unas producciones de 1.480 toneladas y 920 toneladas. En ambos casos una de las causas principales son las arrancadas (más importantes en la demarcación de Girona), mientras que en Barcelona los episodios de sequía de la pasada campaña y también su continuación este año han impactado en los datos. Cabe recordar que muchas de las plantaciones barcelonesas se encuentran en zona de secano y dependen básicamente de las lluvias. Después de años de muy baja producción (2020, 2021 y 2022) y de afectaciones climáticas (sobre todo heladas, granizadas y la grave sequía), la campaña pasada Cataluña recuperaba su potencial productivo, pero, este año, como consecuencia del estrés hídrico sufrido por los árboles y las altas temperaturas, vuelve a caer la previsión en un 4%.
Según Benjamí Ibars, presidente del Comité de hueso de Afrucat,: “Ya nos encontramos en campaña y el hecho de que Murcia haya sido precoz este año, mientras que nosotros estamos respetando los tempos normales de campaña, permite que no se solapen las producciones y que el mercado se mantenga fluido y la fruta se venda. Podríamos decir que, actualmente, un año normal como este se puede considerar excepcional.”
Para Joan Gòdia, director general de Empresas Agroalimentarias, Calidad y Gastronomía del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural: “después de muchos años en los que se han sucedido fenómenos meteorológicos como granizadas, heladas o la sequía del año pasado, nos encontramos en un año normal, con prácticamente nuestro potencial productivo y sin falta de agua.”
Manel Simon, director general de Afrucat, ha apuntado que: “los factores de inicio de la campaña nos hacen prever que será correcta y, si vamos ordenados en la entrada al mercado, esperamos poder gobernar bien nuestra producción. También cabe recordar que para que todo funcione bien en el verano debe hacer calor. Como bien sabemos todos, el consumo de las frutas de agua está relacionado con las altas temperaturas del verano.”
Simon ha hecho un inciso en la incertidumbre de la incidencia de plagas en la producción: “el año pasado hubo una afectación importante de trips y de mosca de la fruta que hizo que, aunque los precios fueron aceptables, el rendimiento de muchas plantaciones bajó, con el grave impacto que esto conlleva en la cuenta de explotaciones de los agricultores. Ahora que se acercan las elecciones europeas, queremos remarcar nuestra petición a Bruselas, y en concreto a la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria), para que cada vez que decidan eliminar nuevos métodos de lucha se hagan estudios de impacto para analizar si hay alternativa de tratamiento o la suspensión puede representar la eliminación de uno o más cultivos en toda Europa. En un momento en que la soberanía alimentaria es tan importante, no nos podemos permitir eliminar cultivos de Europa por no poder llevarlos a cabo y hay que invertir en encontrar métodos alternativos de protección de la producción.”